BASADO EN UN HECHO REAL
Le regalaron un cuaderno para que anotara sus pensamientos en esas horas terminales. Tenía una enfermedad mortal arraigada en todo su cuerpo. Todo el mundo que la conocía se sentía muy apenado, porque era verdaderamente desolador que una joven tan bella emprendiera el viaje de nunca volver.
En esos últimos días, mantuvo muchas horas el cuaderno entre sus manos. Después se lo tendió a un amigo muy querido, diciéndole:
–Ya están completas todas sus páginas.
Pero el amigo comprobó que no estaban sino en blanco.
–¡Yo las veo vacías!
Ella meneó la cabeza con suficiencia, y luego respondió:
–Amigo mío, no quiero que este cuaderno se llene de sufrimientos. Ya es bastante con que los aguante yo. Dios es el único que puede escribir mis últimas páginas.
El amigo nunca apartó de sí ese cuaderno lleno de los silencios de ella.
El jardinero de las nubes.
Le regalaron un cuaderno para que anotara sus pensamientos en esas horas terminales. Tenía una enfermedad mortal arraigada en todo su cuerpo. Todo el mundo que la conocía se sentía muy apenado, porque era verdaderamente desolador que una joven tan bella emprendiera el viaje de nunca volver.
En esos últimos días, mantuvo muchas horas el cuaderno entre sus manos. Después se lo tendió a un amigo muy querido, diciéndole:
–Ya están completas todas sus páginas.
Pero el amigo comprobó que no estaban sino en blanco.
–¡Yo las veo vacías!
Ella meneó la cabeza con suficiencia, y luego respondió:
–Amigo mío, no quiero que este cuaderno se llene de sufrimientos. Ya es bastante con que los aguante yo. Dios es el único que puede escribir mis últimas páginas.
El amigo nunca apartó de sí ese cuaderno lleno de los silencios de ella.
El jardinero de las nubes.
6 comentarios:
muy sabio tu texto. a veces escribimos en nuestros almas una carga llena sufrimiento y pocas de alegria. Hay que saber vaciarlas. Indudablemente tu personaje estaba clara en su vida personal.con afecto. judith
Que sensibilidad en una persona joven, Dios la colmo de sabiduría, y ella escribió con el su vida, hemoso escrito.
Besos
Emotivo relato,que dulzura la de ese ser humano en sus últimos días de vida,seguro que era un ángel de Dios y él la tendrá muy cerca.
Y me pregunto... cuánto no dice una página en blanco... un silencio... una mirada.
Precioso y triste, gracias.
Un abrazo.
Bye bye
sublime
Es triste este escrito, mas si es real,eso me impresionó, el hecho de que termine una vida, siempre impresiona. La muerte impresiona pero ese es otro tema. recive un fuerte abrazo.
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